lunes, 8 de enero de 2007

El método Fresán


A veces sucede que durante algunos días –a veces semanas enteras e incluso meses– nos vemos deambulando por la inquietante vereda del writer´s block. Las ideas no acuden con la puntualidad acostumbrada, el relato parece achancharse, nuestra propia letra nos resulta repulsiva y hasta vulgar, o simplemente cedemos ante la tajante resolución de encender la tele.
Pero, yo ya no me preocupo, encontré una fórmula que me está dando buenos resultados: me basta con iniciar cualquiera de los textos que componen La velocidad de las cosas y ya; las cosas vuelven a su lugar y la (en mi caso, humilde) maquinaria se pone en funcionamiento otra vez.
Tres caracterísicas de los cuentos de este libro que funcionan perfectamente a la hora de ayudar a destrabarse: está claro que un rasgo de estos textos es la cantidad de líneas narrativas que se abren a cada rato, y cada una de ellas permitiría una hipotética continuación por quien quiera recoger el guante; en segundo lugar, no se nos deja de hacer sentir que estamos dentro de la literatura. Indudablemente, los recorridos laberínticos de una narración que se complace en la adición (de nombres, de espacios, de temporalidades, de recursos) responde a una intencionalidad –un poco traviesa– de jugar con el lector.
Y esto último es lo más interesante para el que padece de writer´s block: la cuestión de la adición y cierta desmesura que plantea que cada movimiento de la conciencia narradora es posible de ser incluido dentro del relato. Estos cuentos de Fresán (hablo tan sólo de este libro) son como un tipo lleno de merca que no para de hablar: en un momento tenés ganas de decirle "¡Callate!". Y por eso es bueno para nuestra propia escritura, porque no nos queda otra que comenzar a narrar para que él se calle, nos obliga a iniciar nuestra propia conversación.
(Aclaro que me parece que Fresán es un buen escritor, por las dudas)

4 comentarios:

ugenia dijo...

fresán no me cae muy bien, pero voy a pegarle una ojeada (u hojeada?) a ese libro. Saludos vietnam :)

Demóstenes dijo...

Yo diría "ojeada", aunque quizás me equivoco...
Al libro este hay que encontrarle el sabor, pero una vez que se lo encontrás, es disfrutable. Ojalá te guste (y hasta quizás haga que vuelvas a postear) :P

¡Saludos, Ugenia!

Unknown dijo...

Me dijeron buenas cosas de Fresan pero no lo leí, ahora ando con ganas de literatura argentina fresca, lo cual suena bastante Fresan, pero creo que no tienen nada de saldo así que será otro día.

Demóstenes dijo...

Y bueno, pero a veces (si se puede hacer el esfuerzo, claro) no está mal invertir $20 o $22 ¿no?... :)

¡Saludos!